PREVIA LANÚS

Rodrigo Javier Martínez, 09-09-2015
Si a alguno nos queda una luz de esperanza y un hilo de vos para gritar una victoria que sirva tapar algo de este paupérrimo presente, hay que pedir vaya a saber cada cual a quién o qué (va en cuestión de credos y gustos), que el miércoles sea un gran día futbolero.

Este Vélez Chiquito va a buscar un pase a... semifinales ??!!
Así es, y aunque uds no lo crean.
La misión que ya parece dura por limitaciones propias, va de épica si analizamos el rival y su presente.
Mejor entonces chapear estadísticas ( porque nos favorecen ) e invocar viejos duendes recordando dos partidos y alguna anécdota, todo sea para mufar al rival.

Según www.promiedos.com.ar Vélez y Lanús jugaron 116 veces en Primera División, con 54 victorias del Fortín y 37 empates. El último cruce fue victoria en Liniers 1 a 0, con gol de uno que todavía seguimos llorando, Lucas Pratto.

Para el recuerdo traigamos un partido de 1996, en el José Amalfitani.
Vélez estaba preparando las finales de la Supercopa Sudamericana contra el Cruzeiro y Lanús venía puntero en el torneo local.
Para gusto de quien escribe, esa versión de Vélez es la que mejor vi jugar.
Le pegamos un baile con golpe de K.O. a los granates, victoria 2 a 0, con goles de Bassedas y Camps. Todo un presagio de lo que vendría, Vélez ganó la Supercopa en dos partidos de película, y los del sur se quedaban sin torneo otra vez.

Como anécdota les puedo contar que con ese gran equipo, Lanús vino a jugar a Córdoba, aunque ni me acuerdo con quien. Acompañé a la cancha de Instituto a un amigo granate, que además era fanático de Ariel Ibagaza, un pibito con unas condiciones bárbaras, recorrido exitoso en selecciones nacionales juveniles y con un gran futuro en el fútbol europeo. Ya en el calentamiento, mi amigo le empezó a gritar "Caño, Caño, Cañito", tal el apodo del jugador. Quería que el vago se acerque al alambrado para firmarle una remera. En la cancha no había nadie y se escuchaban claritos los gritos de mi amigo, pero Ibagaza lo miraba y no le daba bola. Así estuvo como quince minutos hasta que se fueron los jugadores a los vestuarios. Mi amigo quedó indignado y a las puteadas. Como sucede casi siempre, Lanús hizo honor a su historia y perdió el partido en tierras cordobesas. Mi amigo granate, enculado por el resultado y más todavía con Ibagaza, se acercó otra vez al alambrado, cerca del túnel de salida de los jugadores a gritar "Caño, Caño, Caño" hasta que el pendejito levantó la mirada, para rematarla con "Un caño te tendría que haber metido en el culo, por pecho frío..."
Jaaa, pobre Cañito...

Dale, Vélez !!