DE VISITANTE VALE DOBLE

Rodrigo Javier Martínez, 29-11-2014
Tanto nos quemaron la cabeza esta semana con el gol de visitante en el Super Clásico de la Hipocresía Argentina (porque son mas anti hinchas del rival que del propio equipo) que no encontré mejor manera de titular esta nueva victoria velezana en tierras de Florencio Varela.
Sin antecedentes previos, salvo amistosos picantes de pretemporada, Vélez llegaba al Tomaghello con la pesada carga de no ganar de visitante desde aquella lejana fecha tres donde los hijos de Avellaneda sufrían los avatares de un equipo envalentonado. Lejos de esos tiempos y con más pesares que alegrías, nuestro Vélez recuperaba a dos soldados vitales en el medio, para recuperar y crear juego, Desábato y Cabral dejaron en claro que Vélez necesita de ellos para armar un medio equilibrado y que pueda hacer circular el balón para poder cambiar el ritmo y generar situaciones.
Más allá del resultado final, Vélez empezaba con más de lo mismo. En 6 minutos el local había tocado las puertas de nuestra endeble defensa con centros, nuestro punto débil. Cardozo no daba garantías y la zaga derecha no hacia pie. Pero Vélez recuperó el balón, emparejo las acciones de la mano del pensante Cabral y el incisivo Pratto. Finalmente a los 18 minutos Caraglio recibió de espaldas, se dio vuelta y habilitó a Pratto para que ponga el uno a cero parcial. Caraglio, generoso y trabajador, nuevamente, asistió a Pratto, mostrando que a veces los goleadores sirven para otra cosa que para meter goles.
El primer tiempo se fue sin complicaciones para Vélez, dándole lugar a una segunda mitad donde el Fortín, de contra, pudo estirar la ventaja ante un Defensa que sin ideas iba pero no creaba peligro. A pocos minutos del final Grillo le comete un claro penal a un delantero local y en la contra Caraglio asiste a Pratto que con una diagonal en velocidad quedó mano a mano para sentenciar el resultado final.
Vélez ganó y se sacó la mufa de visita para alcanzar los 25 puntos, esperar a CASLA por la fecha final y a Boca por uno de los papelones más grandes del fútbol argentino, el repechaje por un lugar en la Copa Libertadores, por eso, de cara a estos últimos e importantes partidos, ganar, y de visitante, vale doble.
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