Empezar un informe de un partido con semejante atractivo, con semejante carga anímica y con semejante final es el sueño de todo periodista, pero como yo no soy periodista empiezo buscando explicaciones a semejante gesta sureña. Caidas globales en casas de apuestas, EEUU atacando Siria, Cristina bajando el límite de ganancias, Moyano sobando a Massa, Fosfito ascendiendo de catégoria y Vélez, si señores, nuestro querido Vélez, clasificando a octavos tras derrotar al mezquino pirata cordobes con una gran actuación... todo esto ¿para que? Para que los astros formen una alineación única e irrepetible y nuestro Presidente, el honorable Grulla, levante por primera vez en su historia la gloriosa Copa Vélez.
Alla lejos y hace tiempo nuestro Presidente (que supo llamarse cristian_velez) ganaba la Champions pero era orteado por Menfiesto en una final tambien similar donde el punto eliminaba a la banca. Quizás la derrota deportiva más sufrida del León de Wilde, pero Hattrick da revanchas y el motor sigue mandando EJEAS dignos de alabanza.
Las apuestas eran lapidarias y el mítico Sport Vélez lideraba las intenciones con dominio abrumador, tal fue el dominio que el partido fue dominado por Clemente con un medio ferreo y una defensa inexpugnable mostrando un ataque lateral imparable. Pero a pesar de eso y de haber llevado el marcador arriba gran parte del partido el Depor se puso 3-2 a falta de solo 20 minutos pero Clemente ni lerdo ni zonzo empato ocho minutos despues para poner el empate en tres e ir al alargue.
Si faltaba algo entre lesiones, goles, tarjetas y todo tipo de incidencias era el tiempo suplementario. Sport Vélez no habia planeado esta situación pero sabio en victoria y en derrota siguió con el contro y a solo 5 minutos del comienzo tuvo la gloria en sus pies cuando el arbitro cobró un claro penal para los del Oeste. Husna, con la carga de la historia se plantó para definir el partido, pero los nervios lo traicionaron y el tiro se fue sumamente desviado. Con coraje y valentía el León soporto los embates del medio de Sport y en el segundo tiempo los de Clemente, sumergidos en la confusión y el desorden de haber tenido la victoria en la palma de la mano dejo libre al hungaro Gondzic quien remató al arco para con su gol de oro sellar el 4-3 definitivo y escribir su página en la historia del club y la Copa Vélez.
Rugió el León, vibró Wilde, festejó todo el sur y el gremio de fleteros... a pesar de los merecimientos y de los condicionamientos, el Deportivo Fabricio Fuentes escribió su historia entre los grandes, sellando a fuego un deseo eterno que quemaba en su sangre... la Copa Vélez... enhorabuena Presi, usted lo merece!