SOPA PARAGUAYA

Sebastian Jablonka, 01-03-2016
Si ayer hubiese sido 2015, el título de esta nota sería “Otra vez sopa”. La frase más escuchada en las últimas horas fue “el año pasado, este partido lo perdíamos”. Todo eso es cierto. Pero las cosas cambiaron. Tal vez las no salgan como queramos, seguramente cueste mucho y los obstáculos serán difíciles, pero cuando la cabeza trabaja de otra forma, cuando hay motivación, cuando todos vamos para el mismo lado, los resultados pueden llegar. Y van a llegar.

Pasó mucho tiempo para que se volviera a escuchar el “señores dejo todo, me voy a ver a Vélez…” bajando de una popular repleta (cerrando bocas, termismo mediante) minutos después de que Santiago Stecaldo marcara de tiro libre y sobre la hora el gol de la victoria del Fortín ante el difícil Gimnasia y Esgrima de La Plata.

Vélez no ganó por ser mejor futbolísticamente e incluso, de no ser por la expulsión de Rasic, podría haberlo perdido. La visita estuvo mejor parada durante buena parte del partido y anuló muy bien a las individualidades velezanas. De a poco Vélez fue perdiendo la pelota y jugando al ritmo que Gimnasia pedía. La ventaja que tenía gracias al golazo del Fellaini ensamblado en Asunción no le aseguró la tenencia de la pelota ni el control del partido, y después del empate de la visita (floja respuesta de Aguerre, que pide banco) llegar al arco rival se le hizo muy cuesta arriba. A pesar de la solidez de Gianetti, los buenos pasajes de Cáceres y los intentos de Toledo, Vélez no pudo lograr una buena asociación en el campo. Y más allá del gol de Stecaldo, los cambios no parecían darle aire fresco al equipo.

Pero, (sonará a libro de autoayuda) pero cuando cambiás la mentalidad, las cosas pueden salir mejor. De la misma forma que consiguió el empate parcial en el Nuevo Gasómetro con un jugador menos, logró llevarse los 3 puntos ayer. Con el hombre de más hubo un clic, una sensación de que podía ganar. A falta de fútbol, entrega. Y el gol del debutante pagó esa entrega.

Los hinchas festejamos la victoria más como la de un partido por el campeonato que por la 5ta fecha y eso tiene un por qué. Sembrar sobre esta base de unión es más importante que el resultado.