FULBO

¡Buenas noches mi estimado público! En esta ocasión le traemos el reconocido Hurinforme, que no puede faltar en la cartera del caballero o en el bolsillo de la dama. Un producto a la medida de la todas las necesidades, o sea, no sirve para nada.

Hoy nuestra investigación central girará alrededor de la querida pelota, la mimada, la caprichosa, la infectada. Hoy trataremos de entender los misterios detrás de bambalinas, las razones del negocio, las intrigas de Palacete que se traman en Viamonte, los personajes siniestros que manejan los hilos de nuestro amado deporte, los motivos ocultos de... mentira... no vamos a resolver nada, pero si podemos hacer una cronología, poco precisa y falaz, de lo que paso hasta ahora con el bendito fútbol argentino.
Todo arrancó allá lejos, en el espejito retrovisor, cuando el Covid-19 asomaba la napia y el Rodo de Nuñez hacía lo que mejor sabe hacer, usar el escritorio. Mientras se jugaba la primera fecha de la Copa de Superliga y los jugadores se presentaban a regañadientes, River metía batacazo y no se presentaba en Tucumán. ¿Sanciones? Bien gracias, pero la realidad era que comenzaba el debate. ¿Jugar o no jugar? El debate duró poco. El Beto of the people apretó el Botón Rojo y todos guardados. La emergencia sanitaria y la tatengue naciona... eh digo, la unión nacional le dieron lugar a meses de calma en el mundillo del fútbol y a finales de Abril la Copa de la Superliga, con una fecha jugada, se daba por cerrada. Pero la calma no duraría para siempre y la tormenta llegaría.
De a poco el fútbol europeo, y su perfecta organización, le dio lugar a la pelota y se comenzó a sentir un ronroneo en los pasillos. Los terraplanistas se empezaron a mover y la gente, inquieta por su libertad, cambió aplausos a los médicos por la elaboración de teorías conspirativas y lo que prometía ser una nueva Argentina se transformo en el quilombo de siempre. La política gano lugar en la crisis y entre barbijos, conteo de casos y protestas libertarias el fútbol no podía quedar afuera. Clubes ahorcados económicamente, las ligas presionadas por sus patrocinadores y la televisión sin su circo romano dieron comienzo a una pregunta que pronto dejaría de ser del hincha para pasar a ser una cuestión de Estado: ¿Cuando vuelve el futbol? Que el Walter Pico no llegaba, El Beto opinando, que Futbolistas Agremiados no tenía garantías, que los jugadores se estaban oxidando, que el dolar se devaluaba y los sueldos se comprometían, la tormenta se había desatado.
Todos los actores habidos y por haber hacían su aparición en escena, el debate mas esperado comenzaba, pero la realidad es que lo que parecía ser una novela interminable tuvo algunos capítulos de incertidumbre que pronto se disiparon. Protocolo y vuelta a los entrenamientos. Gines, con su barbijo mufa, y Robin Tapia pegaban el batacazo, volvíamos a las prácticas. Con la tabla de contagiados como nuevo furor, el fútbol volvía al ruedo luego de casi 4 meses de entrenamientos vía zoom o en departamentos.
El 10 de Agosto, los equipos de primera, y Tigre (?), volvían a los entrenamientos bajo estrictos controles. ¿El ascenso? Bien, gracias. ¿El ascenso mas abajo? Bien también. ¿Pero entrenar para que? Bolubol confirmó la Copa Libertadores para el 15 de Septiembre y ya antes del regreso a entrenar, comenzaba el puterío. Que los días para entrenar, que no se cruce el torneo, que no tenemos tiempo para prepararnos. El llanto liderado por los dos "grandes" del fútbol argentino hacía ruido a los mandamases. ¿Presión para volver? Seguramente. Ponerle un micrófono a Gallardo es como darle una navaja a un mono de laboratorio lleno de fafafa y el ruido sonó y el fútbol volvió, quizás en el principio del fin. Entonces se armó el torneo, porque no podíamos dejar contentos solo a los grandotes, a la gilada le dieron un campeonato (bueno, si está bien llamar campeonato a semejante invento) de 2 meses que parece el vomito de un borracho de bar de Plaza C. Escupido por la inteligencia de un Hombre de Java, el torneo planteado parecía un canto a los trofeos yanquis que se definían por penales a la carrera o de aquellas liguillas mexicanas que tenias que tener la ciudadanía azteca para entenderlos.
Esta anomalía de la naturaleza le dio lugar al grande debate que, eventualmente, tenemos en nuestra país: El sexto grande. Vélez fue al copón de los mejores y Nadur salió a llorar por todos los canales y todo el futbol argentino se hizo eco de esta trama. Claro, están todos al pedo.
La pelea de Messi Barcelona y el debate de la grandeza sacó un poco del eje el tema principal que fue la vuelta al fútbol para retomarlo ahora con medio plantel de Boca positivo a 10 días de su debut copero. ¿Que hace la AFA? Patea un mes para adelante lo que se había pactado, en primera instancia, para finales de este mes. Pero la Copa no afloja y estamos a un paso de la competición con las burbujas sanitarias se rompen en todos los planteles. ¿Profesionalismo? ¿Afectos? ¿Travestis? Que pensar en todo este caos. Con más de 30 casos, la mayoría en Boca, el fútbol argentino hoy se debate si jugar o no jugar y la realidad es que la jugada mas peligrosa hoy, es pensar que tenemos cráneos para llevar a cabo cualquier patriada. ¿El destino? Incierto, el escritorio se relame.

CHAMPIONS

El Fortín 6-1 Athletic Club Vélez Sarsfield
Llegó a su fin la enorme Copa de Ema. La frenó el invencible Drepy que se prepara para festejar otra Champions. ¡SALUD!

LLANERO 1-2 Fortinero FC
Partidazo en la otra semifinal. Lleno de incidencias en la previa (lesiones por doquier) y con un partido muy parejo el duelo tolkiano fue para el Brad Pitt de Villa Luro. ¿Brazenas? Presente.

UEFA

Fortineros 1-0 Sport Vélez
En mas de 50 ediciones de la Copa Vélez no recuerdo un caso como el de Melina. La verdadera Cenicienta. ¡Salud Fortineros! ¡CAMPEONES!¡LA PEÑA TE SALUDA!

INTERTOTO

Vélez Gótico 2-4 Buen Gusto S. de F.
No fue el tiempo de Batman (ya lo será), fue el momento de otro superheroe, el de Fredbongusto. Héroe de gambetas y lujos, de champagne y algunos otros vicios. ¡Salud Buen Gusto Sociedad de Fomento! ¡CAMPEONES! ¡LA PEÑA TE SALUDA!