MIRAR ADELANTE

Luego del papelón del domingo pasado Vélez necesitaba ganar. No importaba como, pero debía ganar. Era importante desde lo anímico (o eso queremos creer), desde lo competitivo (hay que seguir peleando el torneo) y desde lo emocional (el hincha necesitaba dejar de sufrir).
Y Vélez ganó, por ende, desde lo estrictamente necesario, El Fortín hizo lo que tenía que hacer. Cero reproches, cero exigencia desde el estilo o la calidad, había que ganar y se ganó.
Ahora, si les parece, nos ponemos a hilar un poco mas fino y podríamos analizar porque terminamos pidiendo la hora con Hoyos como figura y con un jugador mas que el rival. Definitivamente Vélez es un equipo cuando enfrenta rivales inferiores o parejos y otro equipo cuando enfrenta a un rival de jerarquía.
Nuevamente sufrió desacoples defensivos, errores en el retroceso, poca inteligencia para ocupar espacios pero, al mismo tiempo, fue un equipo punzante que le creo muchos dolores de cabeza al rival cordobés. Vélez solo entiende los partidos yendo, buscando, pero sufre mucho atrás. Está desequilibrado y algunos rendimientos son muy bajos. Le alcanza para ganar porque Orellano es la verdadera joya, porque Lucero entiende bien su rol en el equipo, porque Poblete tuvo un partido correcto y porque Hoyos, después de mucho tiempo, volvió a ser determinante para ganar puntos.
Pero por otro lado no encuentra rendimientos dignos en Abram (pide banco, con generosidad, a gritos) o Almada. Ricky tuvo algunos destellos, De la Fuente sigue en deuda y Ortega dejo de ser el Ortega que todos esperábamos, pero sigue siendo un jugador clave.
Vélez es esto, desequilibrio constante, sufrir, buscar, quedar expuesto y entender el futbol como una autopista sin límite de velocidad. ¿Pero es el camino? Seguro lo sea ante rivales como el de ayer que, faltos de puntería, no pudieron empatar un partido que merecían.
Pero si, es hilar fino, y aunque parezca irresponsable de mi parte obviar lo de ayer no les quiero dejar de ser honesto y serles sincero, ayer y después del golpe de la semana pasada, me conformaba con ganar medio a cero con un gol ilegitimo y sobre la hora.
Porque Vélez es otra cosa, Vélez es protagonismo, grandeza, pero también hay que saber luchar en el barro porque ganando se labura mejor y mirando para adelante se olvida más rápido el dolor.

Foto: Sitio Oficial Vélez Sarsfield.