DAR LA OTRA MEJILLA

Rodrigo Javier Martínez, 01-04-2021
Lo vimos venir. Vimos venir que Pellegrino, siempre acertado y respaldado por los resultados, alguna vez podía fallar. Y falló fulero, y aunque le sobre crédito y respaldo por parte de la gente, este fallo empezó en Varela cuando eligió un mix para priorizar un partido que, ya jugándolo, e incluso perdiéndolo, te asegura un lugar en el plano internacional, pero que no ameritaba romper el andar en el torneo local.
Ahora, partiendo de este error nos preguntamos, ya en el plano futbolístico, como se puede fallar tanto en el plano defensivo. Como Vélez tiene que entrar a la cancha sabiendo que tiene que hacer, mínimo, dos goles para rescatar un empate. Como el error es sistemático y genera goles en contra. Como fallan los retrocesos y los cierres. ¿Cuánto más nos podemos preguntar? Creo que mucho. Ayer Vélez no jugó los primeros 25 minutos y el olor a papelón surcaba el aire. En 25 minutos Vélez, por errores obscenos y propios, regaló dos goles y el dominio del partido, hasta que Janson, tras una jugada aislada y bien liderada por Almada, definió de manera correcta y ayudado por la floja respuesta de Arboleda. Era el 2 a 1 y el trámite del partido cambiaría. A partir del gol de Vélez y hasta el minuto 73, los dirigidos por Longaniza superarían drásticamente a Banfield quien, durante varios tramos de ese lapso, se encontraría grogui esperando el golpe del KO. Tras varias jugadas de riesgo apareció Orellano que, a 7 minutos de iniciar el complemento, comenzó una guapeada por zaga derecha que termino en un gol con su marca registrada. Vélez llegaba al empate y seguiría haciendo méritos para ganarlo, pero llegaría el fatídico minuto 73. Pero esto empezaba 3 minutos antes cuando Abram, en una salida siniestra, perdió la pelota y fue amonestado por hacer un foul ante su falla garrafal. De ese tiro libre vino un córner, que terminó en otro córner que fue el originó el tercer gol de Banfield en la cabeza de Cabrera. Otro error, otro partido que esta vez no se remontó, porque con el tercer tanto del Taladro, Vélez ya estaría fuera de partido hasta el pitido final.
Se hizo todo mal desde Varela y se coronó con una derrota que duele por como se dieron las cosas, cuando no debería ni siquiera movernos la aguja.
Y duele mas que la derrota, o que cualquier otro análisis, saber que mientras el socio sufre de todo tipo de angustias, algunos festejan incumpliendo normas en lo mas sagrado que tenemos, nuestro club. Basta de salir en los policiales. Basta de vergüenzas.

Foto: Sitio Oficial Vélez Sarsfield.
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