SOMBRIO

Cuando vi la formación, a media hora del partido, me dieron ganas de irme a dormir. Sepan disculpar ese pesimismo, esa nube negra que me persigue, les juro que no soy así y les juro que trato de apartarme del clima institucional que nos devora, pero cuando vi ese once inicial salí corriendo a todos mis grupos de Whatsapp fortineros a decir que me quería ir a dormir o, preferentemente, morir.

Vélez lleva dos partidos seguidos, casi, sin patear al arco. Batalla los partidos, pone fuerte, pero no más que eso. No se puede resaltar nada mas que errores propios y falta de una idea de juego. ¿Y saben que es lo que mas duele? Que ayer, con un poco de algo, el partido se peleaba y hasta nos podríamos haber traído un punto o quizás más, pero con la formación inicial, la falta de una idea juego y algunas actuaciones muy malas, Rac*ng se llevó una victoria merecida.

Algunos nombres ya cumplieron un ciclo en Vélez y otros, mas nuevos, parecerían no estar a la altura o no mantener un nivel regular. ¿Y los refuerzos? Mucha confirmación de jugadores de jerarquía, pero hoy, si se quieren guardar algunos nombres claves, lo que Medina plantó en Avellaneda es lo que tenemos, lo que nos queda. Si no están Orellano, Pratto o Caseres, lo que ayer salió a la cancha es lo que hay. Entonces solo nos queda confiar en los pibes, en nuestra Fábrica, que comete errores inocentes o pecados de juventud, pero que pone la cara por la camiseta.

Miro el horizonte y solo pienso en un milagro. Esperar que en estas semanas la secretaría técnica concrete los refuerzos que tanto esperamos y que el cuerpo técnico haya tomado nota de los puntos endebles y de aquellos nombres que ya dieron todo lo que tenían que dar. Porque hoy en Vélez ya hay muchos jugadores que han demostrado no estar a la altura y no tener la jerarquía suficiente. ¿Esto es culpa de ellos? No, es culpa de la falta de planificación, de errores dirigenciales y de una cantidad de desaciertos que se vienen sumando en estos últimos años.

Vélez tiene que volver a ser Vélez. Y no lo digo por sumar una estrella, que ojalá pase en el corto o mediano plazo, sino que lo digo por volver a retomar la senda del criterio y la gestión deportiva. Mirar al club desde adentro y volver a ser la institución que nunca quisimos dejar de ser. Nosotros, los hinchas y socios que estamos sufriendo, no nos merecemos este Vélez.

Foto: Sitio Oficial Vélez Sarsfield